El Cristal de Murano
viene de una isla pequeña de Venecia que lleva el mismo nombre y que ha sido el
centro industrial del cristal soplado desde hace siglos, concretamente una
tradición vigente desde el Siglo XV. Es una joya artesanal que se crea a través
del espectáculo y la belleza, a lo que se suma el arte de soplar el vidrio, un
oficio peligroso, ya que inhalan gases venenosos que emanan de los minerales
que emplean.
Su
historia y lugar de origen y la complejidad y peligrosidad de hacerlos son
claves para darle a esta joya el valor que merece, muy al margen de las miles
de imitaciones existentes en el mercado, una paradoja ya que, si se trata de
cristal auténtico no hay posibilidad de encontrar una pieza igual que otra. ¿Te
gusta el cristal de Murano?
¿Quieres ver el proceso de elaboración? Aquí te dejamos un vídeo
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